Las empresas españolas irán a donde no sean recibidas con hostilidad

ÁNGEL LASO D´LOM. MADRID.
«En mis discursos no hay nada para que nadie se pueda sentir ofendido. Son manifestaciones a favor de la libertad económica que se entienden en cualquier parte del mundo, y que por suerte tenemos en España. Y que no es otra cosa que un mercado libre y abierto, seguridad jurídica, respeto a la propiedad privada y respeto a los contratos que se firman y a las leyes», declaró ayer a ABC el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, tras las críticas vertidas contra los empresarios españoles por algunos dirigentes políticos iberoamericanos.
«Todas ellas -añadió- son variables que deben cumplirse para que las empresas inviertan y creen riqueza y puestos de trabajo. A la vez, hemos querido transmitir en estos discursos nuestro compromiso, el de las empresas españolas que están en Iberoamérica, con la responsabilidad social corporativa para intentar extenderla de las grandes compañías a las medianas y pequeñas. También queríamos hacer patente y desarrollar allí nuestro respeto al modelo de diálogo social que existe en España entre la patronal, los sindicatos y con el apoyo del Gobierno. De hecho, hemos acordado en estas jornadas crear un Consejo Económico y Social (CES) iberoamericano».
Para Díaz Ferrán,«las inversiones en Iberoamérica y en cualquier otra parte del mundo donde están los empresarios españoles son siempre con espíritu de permanencia, pero el mundo está hoy muy globalizado y los gobiernos de los países deben saber transferir su confianza a los inversores extranjeros, como también a los locales. Es evidente que si en unas zonas se es hostil a la inversión y en otras, al contrario, se es amigable, las empresas se van a ir a donde se les de más facilidades y apoyos para desarrollarse y crear riqueza».
El presidente de la patronal subrayó también que «mis declaraciones iban dirigidas a los empresarios de todos los países de Iberoamérica, incluidos España y Portugal, y no se referían a ningún país concreto. De manera que, si alguien o algunos se han sentido aludidos, es porque quizás no están cumpliendo en su país las condiciones imprescindibles para el desarrollo y bienestar de las empresas, y, por consiguiente, de la sociedad en su conjunto.
Respecto a la posibilidad de que las empresas españolas se vayan de Iberoamérica si siguen siendo hostigadas, Díaz Ferrán afirmó que «el empresariado español ha ido a Iberoamérica, en su mayoría, con ánimo de permanencia y de mejorar su actividad, pero no cabe duda de que si hay nuevos gobernantes con poca experiencia, o que buscan otros fines, y que no saben lo importante que es que un país tenga buenos empresarios capaces de crear riqueza y empleo, pues a lo mejor las empresas tendrían que verse en la obligación de mirar hacia otras zonas».
El presidente de la CEOE recibió ayer el respaldo expreso de la Organización Internacional de Empleadores (OIE) que representa a las organizaciones cúpula empresariales de 140 países en todo el mundo.