Sectores populares son los más afectados con las regulaciones
Renan Acosta, vocero del comité de usuarios Oyentes Interactivos de la Radio (OIR), a firma que los controles sobre colegios y clínicas perjudican a los sectores populares y protegen a las clases pudientes.
Acosta, junto a varios dirigentes comunitarios del 23 de Enero, Catia y Petare, explica que "los grandes colegios, a los que acuden los que ellos llaman oligarcas" podrán subsistir a pesar de la congelación de matrículas. "Son los pequeños planteles que se encuentran en zonas populares los que han comenzado a cerrar porque no tienen presupuesto para mantenerse. Tal es el caso del Colegio Salto Ángel en Los Frailes de Catia, la Unidad Educativa El Paraíso y el Independencia".
Señala que igual sucederá con las clínicas privadas, las grandes llegarán a acuerdos y podrán subsistir, pero las pequeñas que están en las zonas populares tendrán que cerrar sus puertas dejando indefensos a los más pobres porque el sistema público de salud no sirve para nada.
El dirigente expresó alegría por el regreso de RCTV a través de cable y satélite, aclara que su retorno es el resultado de la presión que ejerció el pueblo venezolano. Pero advierte que "el éxito es parcial, no se puede cantar victoria porque el Gobierno logró una de sus metas. La mayor audiencia del canal está precisamente en los sectores populares, esos que no tiene recursos para contratar servicios de televisión por suscripción y que siguen sin poder ver RCTV".
El universal
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